En unas horas empezamos… pero no creáis que los monitores llegan 5 minutos antes… no, no, no… llevamos varios días en la Pradeira poniendo todo a punto para recibiros.
Y claro, en medio de tanto trabajo es necesario un momento de expansión cerebral… un momento para airearnos… y para eso nada mejor que subir alto… muuuuy alto!!!
Momentos para compartir pensamientos juntos, para reírnos, para hablar, para agradecer muchas cosas buenas que podemos compartir, y pedirle juntos a Dios que estos días sean geniales.
Gracias a cada uno de los monitores por vuestro buen rollo… trabajar así es un placer!!
Y como no… uno de los peques del campa también quiso volar!!!!
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